Ser diferente no es fácil, pero aquí rompemos los esquemas

Cuando decidí abrir Centro Óptico Alhazen, lo tuve claro: quería crear algo diferente. Una óptica donde cada persona se sienta escuchada, cómoda y bien atendida. Donde el cuidado visual fuera algo más humano, más completo, más tuyo.

Incluso desde la calle, ya se nota que esto no es una óptica cualquiera. Nuestro escaparate luminoso y la cuidada exposición de gafas reflejan nuestro estilo, nuestra apuesta por la calidad y la atención al detalle.

Diseñamos cada rincón pensando en ti. Queríamos un espacio amplio, con luz, con alma. Una atmósfera acogedora que te hiciera sentir como en casa desde el primer momento. Y por supuesto, con el respaldo de tecnología de última generación para cuidar tu salud visual con precisión y profesionalidad.

Aquí realizamos revisiones visuales completas, mucho más allá de comprobar tu agudeza visual. Porque cada mirada cuenta una historia, y la tuya nos importa.

Y si vienes acompañado, mejor aún. Hemos creado una sala de espera donde puedes disfrutar de un café, té, un refresco, leer un libro o simplemente relajarte. Los peques también tienen su rincón especial, porque creemos que ir a la óptica puede ser una experiencia agradable para toda la familia.